miércoles, 28 de abril de 2010

LA TRANSCENDENCIA


Juan nació en una capital de provincia con vistas al Mar Cantábrico. Le conocí en Madrid porque coincidimos en unas clases de Juan Hidalgo en el Círculo de Bellas Artes.

Daba la sensación cuando le observabas detenidamente, de que su ciudad se le había quedado pequeña ante tanto "enfant terrible". Pronto Madrid corrió la misma suerte....

Ensanchó sus propios límites y se fué a recorrer el mundo. Su corazón necesitaba un vestido nuevo.

Nos volvimos a ver con la Plaza de las Cortes como patio de butacas. Trabajaba en una Fundación con sede allí mismo.....habían pasado casi 20 años.

Veinte años que concentró en 150 minutos de un largo y entretenido monólogo. Su alma encontró sus propios límites. Había vivido con monjes en la India, con chamanes en los desiertos de México y en las selvas de Colombia. Pero su última parada la realizó en Japón, en un monasterio Zen. Había pasado 3 días y 3 noches delante de la puerta del director, sin apenas comer ni moverse. Cuando le recibió, le preguntó en perfecto inglés que de dónde venía. España es mi lugar de origen. Si tenía trabajo, no señor, estoy viajando para poder encontrar mi propia transcendencia. ¿Y mujer?¿Y los hijos?, no señor, necesito encontrar a Dios, ese principio creador en mi propio corazón.

YA!-parece que le contestó-todo eso está muy bien.

Y lentamente le habló: Vuelve a tu ciudad, encuentra trabajo, cásate, ten hijos y luego vuelve a verme y me cuentas cómo te sienta vivir.

Juan se casó y en eso de tener hijos estaban cuando nos encontramos....."pero el mundo está muy mal, la contaminación, el cambió climático...Nos hemos comprado un pequeño terreno en Badajoz".

Dios!!!Él tan de mar y ahora tan de tierra adentro.

Fué un fugaz encuentro. Puede que haya regresado a Japón para contarle al monje cómo es su experiencia vital. Puede incluso que la transcendencia le llegara cabando coles o arreglando el huerto o simplemente viendo pasar la vida ante sus ojos.

Y es que la vida anda muy mal con tanta contaminación, con tanto cambio climático.....y ahora encima LA CRISIS.


(Con mucho cariño para Dioni)

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