50º ANIVERSARIO FESTIVAL DEL CANTE DE LAS MINAS DE LA UNIÓN
Miguel Poveda, el último rey del cante, de la copla, del fado, del tango argentino, del buen hacer, universo musical, del creer que el trabajo, el amor a tu profesión y el respeto, te llevan al triunfo seguro. Cuatro discos de flamenco, agenda completa y “Lo difícil es cantar lo que todos han cantado, y que llegas tú, y lo que hacer tú, sea nuevo… Qué difícil, Juanito”. Hoy en Suma Flamenca la sabiduría cantaora desde Cataluña, un emigrante conquista los escenarios del mundo, Hoy vive en Bormujos, Sevilla, el último rey del cante.
Miguel Poveda, el último rey del cante, de la copla, del fado, del tango argentino, del buen hacer, universo musical, del creer que el trabajo, el amor a tu profesión y el respeto, te llevan al triunfo seguro. Cuatro discos de flamenco, agenda completa y “Lo difícil es cantar lo que todos han cantado, y que llegas tú, y lo que hacer tú, sea nuevo… Qué difícil, Juanito”. Hoy en Suma Flamenca la sabiduría cantaora desde Cataluña, un emigrante conquista los escenarios del mundo, Hoy vive en Bormujos, Sevilla, el último rey del cante.
Juan Verdú.
En 1993 la vida artística de Miguel Poveda cambió para siempre al conseguir cuatro de los cinco premios del Festival Internacional del Cante de las Minas de La Unión (Murcia), uno de ellos la Lámpara Minera, el más preciado. Desde entonces ha logrado dejar huella y tener su propio espacio en la historia de flamenco, haciendo valer su condición de cantaor entero y verdadero, sin paliativos ni atenuantes de ningún género, cantaor que va por derecho en su arte, que no entiende de modas pasajeras y cuya trayectoria en tan corto espacio de tiempo le ha convertido ya en un nombre de primer rango en el mundo del flamenco. Diecisiete años después, Miguel Poveda y Suma Flamenca quieren rendir homenaje al Festival del Cante de las Minas. Justo es este reconocimiento al decano de los festivales flamencos que cumple en este año, su 50 aniversario. Tiempo en el que ha mantenido la fuerza y sabiduría del flamenco, tanto en los buenos como en los malos momentos que ha tenido nuestro arte. Miguel Poveda presenta un concierto en el que nos invita en una primera parte a un recorrido por los distintos cantes mineros acompañado de las guitarras de Chicuelo y Juan Ramón Caro. El recital continúa con un repertorio variado dentro del amplio abanico de cantes (cantiñas, soleá, tientos y tangos, tonás, seguiriyas, bulerías, malagueñas, abandolaos ó aproximaciones flamencas a la copla, entre otros) que sabe decir con sensibilidad y dominio de los registros expresivos de su voz, que puede sonar fuerte y poderosa ó dejarse llevar por melismas de gran delicadeza, acompañado en ésta parte de las palmas de Carlos Grilo y Luis Cantarote y la percusión de Paquito González.
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